Hacer fotografía estenopeica es una manera de replantearme el ver las cosas en una dimensión diferente; me refiero a el darme una frescura visual y detenerme en el tiempo prolongado que me dan las imágenes estenopeicas.

Ser estenopeico o ver estenopeico es aprender a conocer la luz, esa luz natural que estamos acostumbrados a ver de manera lógica y analógica. Lo estenopeico hace que mi mirada tenga un descanso tal que el estenopo, ese pequeño orificio que permite hacer luz donde antes era oscuridad, me de la oportunidad de ser infinito en mis posibilidades creadoras visuales.

Por otra parte, independientemente de comprar una cámara construida, el yo hacerla y rehacerla me da la satisfacción de regresar a una infancia eterna.