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Cartografía Visual.

Por Oscar Guzmán


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Por más de 35,000 años hemos estado representando lo que vemos, lo que imaginamos, lo que nos aterra, lo que deseamos. En superficies de obscuras cuevas y en rocas sagradas, Shamanes ancestrales plasmaron, en proyecciones ortogonales, perfiles canónicos de bestias aterradoras y geometrías indescifrables. Como con un poderoso telefoto conceptual, el Shamán comprimió la distancia y generó las primeras cartografías visuales del mundo.

Arboles © Oscar Guzmán

La universalidad de esta forma de representación y su duración extraordinaria, nos permite asegurar que, en el gran esquema de la historia de la humanidad, la cartografía visual basada en perfiles ortogonales y huellas misteriosas, nos ha caracterizado como Especie Gráfica.

Espacio Sagrado © Oscar Guzmán


Después de esta época de representaciones planares y contundentes, se trataron nuevas estrategias visuales. En Asia, se desarrollo la perspectiva axonométrica. En Persia, y durante el esplendor del arte Bizantino, se exploraron exóticos métodos de proyección y, hace apenas 600 años, durante el Renacimiento ––gracias a las contribuciones de Alhazein, Roger Bacon y Brunelleschi—, se inventó la perspectiva lineal y se usaron en forma extensiva la cámara oscura y la cámara lúcida. Los artistas renacentistas y de hecho los que les siguieron, utilizaron estas herramientas para lograr sus cartografías visuales.

Espacio Acuático © Oscar Guzmán

Fortaleza © Oscar Guzmán

En los siguientes siglos, los esquemas existentes de proyección para representar el espacio, se enfrentaron a una selección natural. Algunas cartografías visuales se extinguieron; otras se unieron para producir híbridos gráficos. Finalmente, a finales del siglo XIX, la representación que utilizó la perspectiva renacentista se consolidó como la manera mas aceptada de representar al mundo.

La Biblioteca de Juanes © Oscar Guzmán

Curiosamente, la invención de la fotografía, a mediados de 1800, evidenció la rigidez representativa de la pintura académica. Los aristas asumieron nuevamente su papel de investigadores visuales y, así, en un movimiento audaz, la pintura y la fotografía del siglo XX redefinieron los parámetros existentes en la representación visual. El Cubismo, el Abstraccionismo, Rodshenko, Moholy-Nagy, Kandinski, nos devolvieron la capacidad de inventar vibrantes y coherentes cartografías visuales. EL impacto de sus investigaciones visuales aún resuena en el pluralismo artístico de nuestros días.

El Estudio de Ariel © Oscar Guzmán

En el último tercio del siglo XX, la computadora personal apareció y, en escasas décadas, revolucionó nuestra manera de pensar y de representar. El impacto en la fotografía fue contundente. Se crearon programas de diseño tridimensional a través de los cuales es posible generar cartografías de espacios imaginarios. Estos programas abrieron la posibilidad de crear realidades virtuales. Estas jugarán un papel importante en el futuro. Finalmente, la yuxtaposición computadora/cámara inauguró, entre otras cosas, la posibilidad de crear nuevas formas de representación visual.

La Escalera Roja © Oscar Guzmán

 

El Planisferio Visual.

La panorámica de 360° nos brinda un ejemplo de lo que el sistema computadora/cámara puede lograr. No se puede construir un lente que capture más de 180°. Por lo tanto, no existe la posibilidad de capturar fotográficamente la esfera del espacio visual. Sin embargo, cuando un gran numero de fotos del espacio que nos rodea (fotos del ecuador visual, del la latitud norte visual, fotos del Zenit visual etc.) son capturadas desde un punto y son ensambladas digitalmente, nos encontramos frente a la representación total del espacio: El Planisferio Visual. Una imagen de representación total en donde el atrás, el adelante, el arriba y el abajo logran coexistir. Además, en esta representación, diferentes instantes son también sintetizados. Aunque las imágenes individuales fueron captadas con un instrumento óptico, el resultado, después de su síntesis digital, es una representación conceptual del espacio y del tiempo.

En la representación total del espacio, en el Planisferio Visual, el observador interfiere. Es un obstáculo, porque ocupa un lugar en el espacio que quiere representar. El observador, tiene que ceder “su” espacio al espacio total que quiere representar. En su ausencia está su presencia.

Espacio con Espejos © Oscar Guzmán

El sistema computadora/cámara ha trascendido a la óptica de la cámara, y nos ofrece una nueva manera de codificar el espacio. Esta yuxtaposición de tecnologías nos ha abierto las puertas para inventar nuevas formas de representación, sin los límites impuestos por tecnologías anteriores. Pero a la vez, estos nuevos códigos visuales nos enfrentan a nuevos enigmas y nos invitan a nuevas reflexiones.

Interior Blanco © Oscar Guzmán

Así, entramos de nuevo al mundo de la Cartografia Visual, con nuevas sorpresas y con nuevas paradojas.

Como los Shamanes ancestrales y los artistas del pasado, seguimos haciendo nuevos mapas y nuevos códigos para no perder la fascinación por contemplar, por explorar y por tratar de entender lo que nos rodea.

 

Oscar Guzmán
Mérida, Yucatán, Mexico
Agosto 2004

ozguzman@gmail.com

web: http://www.oscarguzman360.com


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