Viacrucis III

La Marina de Guerra de los Estados Unidos les alquilaba por 80 millones de dólares al año el campo de tiro a otras naciones para que sus aliados pudiesen practicar y probar nuevos armamentos.

Se observan múltiples municiones aún sin detonar, algunas con inscripciones en alemán, al igual que varios aviones utilizados como blanco de tiro.

Estudios científicos documentan alarmantes concentraciones de metales pesados tales como: arsénico, bario, cadmio, cobalto, cromo, fósforo, manganeso, mercurio, plomo, uranio reducido y zinc.  

Estos carcinógenos contaminan el aire, el acuífero y la cadena alimenticia.