De la cámara oscura al cine
imagen 1

Roger Bacon fue un monje inglés que vivió en el siglo XIII. Por el delito de estudiar la naturaleza y de oponerse a las doctrinas filosóficas de su tiempo, que consideraba retrógradas y caducas, fue condenado a prisión perpetua acusado de hechicero.

A Bacon se le atribuye el descubrimiento de los anteojos y la primera referencia a la cámara oscura. En un manuscrito que se supone obra de su mano, dice lo siguiente:
"Para observar un eclipse de sol sin sufrir daños en la vista se debe practicar un orificio, por donde penetrará la imagen discoidal del astro para proyectarse en alguna parte, misma que se altera de acuerdo con las alternativas del fenómeno."

En la segunda mitad del siglo XV, Leonardo da Vinci descubre el mismo principio y así lo hace constar en su Codex Atlanticus. Leonardo sugiere, además, la posibilidad de dar, a este fenómeno, una utilidad práctica.

Antiguo Daguerrotipo

Cámara oscura del siglo XVIII para copiar imágenes

Es Giovanni Battista Della Porta quien, años más tarde, construye la primera cámara oscura con lentes incorporados y que tiene ya definitivamente la utilidad que Da Vinci había intuido. Della Porta dice que sirve... "para que cualquiera que ignora la pintura pueda dibujar con la pluma cualquier objeto..."

La cámara de Della Porta es ya, en potencia, una cámara fotográfica, pues dispone de lentes de precisión y de espejos para reinvertir la imagen.

Sin embargo, y durante siglos, será utilizada únicamente para observar y copiar imágenes, a pesar de que, por el mismo tiempo, el alquimista Fabricius observa que: ..."Las imágenes que una lente proyecta sobre metales de plata, se graban en negro, de acuerdo con la fuerza de la luz..."

A partir del siglo XVI, la cámara oscura prácticamente se estanca y la fotoquímica empieza a ser investigada. A principios del siglo XVIII, el químico Schultze trabaja infructuosamente, tratando de lograr la permanencia de las imágenes proyectadas sobre sales de plata.

En 1780, un pintoresco francés, el profesor Charles, constructor de aerostatos y maestro de física en la Sorbona, había conseguido ya fotografías elementales, proyectando por la luz del sol, la silueta de un hombre sobre un papel impregnado de cloruro de plata. De este modo, la imagen de la silueta quedaba grabada en blanco sobre el papel, pero pasados unos momentos la luz volvía a afectarla hasta hacerla desaparecer.

Investigadores de los principales países de Europa, emprenden una carrera para ver quién da primero con la solución del problema. James Watt en Escocia, el inventor de la máquina de vapor, es uno de ellos.

Pero las débiles imágenes que le resultan por medio de la cámara oscura sobre soluciones de plata, se evaporan al cabo de un corto tiempo. Wedgwood, y más tarde Humphry Davy, insisten sin obtener tampoco ningún resultado. Sobre estos experimentos Humphry Davy escribe:
"Lo que hace falta es impedir, por algún medio, que las partes claras del dibujo sean afectadas por la luz del día. Si se llegara a este resultado, el procedimiento sería tan útil como simple. Hasta la fecha es obligado guardar en un lugar oscuro la copia del dibujo. Este no se puede observar más que en la sombra y durante corto tiempo.

He ensayado inútilmente todos los medios posibles para evitar que las partes incoloras ennegrecieran con la luz.
En cuanto a las imágenes de la cámara oscura estaban, sin duda, muy poco iluminadas para que yo pudiese obtener un dibujo aparente con el nitrato de plata. Aquí estriba, sin embargo, el interés por las búsquedas. Pero todos los ensayos han sido inútiles."

A Davy no se le ocurrió que la emulsión de Nitrato de Plata era poco sensible para captar las imágenes que se producían en el interior de la cámara.

En 1805, en ciudad Real, hoy conocida como San Cristóbal de las Casas, Chiapas, en México - y que entonces era territorio de Guatemala -, Don Enrique Martínez, aficionado a la química y a la cohetería festiva, ensaya con la cámara oscura y una solución de cloruro de plata aplicada a una plancha de metal.
En 1805, en ciudad Real, hoy conocida como San Cristóbal de las Casas, Chiapas, en México - y que entonces era territorio de Guatemala -, Don Enrique Martínez, aficionado a la química y a la cohetería festiva, ensaya con la cámara oscura y una solución de cloruro de plata aplicada a una plancha de metal.
El historiador local, Don Prudencio Esponda, describe así los experimentos de Martínez:

"El sabio profesor Martínez con su misteriosa caja oscura, ha logrado retener sobre una plancha de metal impregnada de productos químicos de su invención, una réplica similar a un dibujo de gran preciosismo de la fachada principal del templo de Santo Domingo.

Cuando hubo sacado en la oscuridad dicha réplica, de la caja mencionada, la frotó con un compuesto de zumo de limón y otros jugos vegetales. De este modo, la imagen perduró por unos días durante los cuales los vecinos más importantes de la localidad pudieron admirarla."

Don Enrique Martínez no pudo continuar con sus interesantes experimentos, pues en enero de 1806, murió en una terrible explosión provocada accidentalmente en su fábrica de cohetes.

De todos modos, era poco probable que de seguir con vida y aún habiendo hecho descubrimientos notables, éstos se conocieran, ya que la lejana provincia donde vivía estaba totalmente aislada de los centros culturales de importancia.

En el año de 1822, Nicéforo Niepce, un químico francés, obtiene la primera imagen perdurable por medio del yoduro de plata. Usando una cámara oscura comprada a un fabricante llamado Chevalier logra, después de una exposición de ocho horas al aire libre, la imagen que desde entonces se conoce como "La mesa servida".

Posteriormente, Niepce se asocia con Daguerre, pintor y decorador, para continuar juntos experimentos con objeto de mejorar el procedimiento. Muerto Niepce, Daguerre continúa las búsquedas y descubre el "Daguerrotipo", procedimiento consistente en obtener imágenes sobre planchas metálicas impregnadas de vapores de mercurio.

Las imágenes de Niepce y Daguerre, eran obtenidas directamente en positivo, por lo tanto no podían reproducirse. Fue Henry Fox Talbot en Inglaterra, el descubridor del negativo y, por consiguiente, del sistema que permita a la fotografía su reproducción ilimitada.

Nicéforo Niepce

Primer Daguerrotipo

En los años que siguieron, la cámara oscura y la fotoquímica tuvieron un desarrollo impresionante. Con el Daguerrotipo, la fotografía - así bautizada por Talbot - se vuelve popular y empiezan a surgir los fotógrafos profesionales.

Como uno de los más importantes cabe destacar a Nadar.
La plancha metálica es sustituida por el cristal y, posteriormente, por el celuloide, material más flexible. Las emulsiones químicas llegan a tener una gran sensibilidad y permiten la toma "instantánea" de imágenes en movimiento.

Es en 1887, que en los Estados Unidos, Aníbal Goodwin inventa el rollo fotográfico, mismo que Eastman/Kodak industrializará de inmediato, creando de este modo una de las bases sobre las que habría de edificarse la sociedad de consumo.

Eastman fabricó cámaras fotográficas a precios populares que venían cargadas de fábrica y tenían que enviarse al laboratorio para extraerles y revelar el rollo.
En 1897, Eastman Kodak lanzó el slogan siguiente: "Apriete usted un botón, nosotros hacemos lo demás."

Con el advenimiento de la película supersensible y, por consiguiente, de la instantánea, los hombres empezaron a preocuparse por representar el movimiento en su continuidad.

La cronofotografía, o sea la forma de captar el movimiento en fases sucesivas, nace antes que el rollo fotográfico y es el antecedente

del cinematógrafo. Pero antes de referirnos a ella, hablemos un poco sobre un instrumento que más tarde permitió la observación de las imágenes captadas por la cámara: El proyector.

El proyector nace de la cámara oscura. Al padre alemán Kircher (1602-1680) se le ocurre invertir su proceso. Si la cámara es capaz de tomar una imagen de afuera hacia adentro.

Por qué no también de proyectar esta imagen de adentro hacia afuera? Poniendo en práctica su teoría, Kircher construye el primer proyector de la historia, que bautiza con el sugestivo nombre de "Linterna mágica".

El artefacto consistía en una cámara oscura provista de un juego de lentes y un chasis corredizo - similar al de los proyectores actuales - donde se colocaban transparencias pintadas sobre placas de vidrio.


Primer Negativo

Para desalojar el humo que producía una lámpara de aceite usada como fuente de luz, la "Linterna mágica" estaba adornada con una gran chimenea de impresionante aspecto. La linterna mágica hace del italiano Cagliostro el precursor del cine embargo, Cagliostro no se queda en esto, sino que añade mejoras mecánicas a su linterna mágica, adaptándole un juego de ruedas que le permite aumentar o disminuir el tamaño de las imágenes a voluntad.


utilización de la linterna mágica en proyecciones recreativas

Retrato de Daguerre por Nadar

La linterna mágica es acogida con fervoroso entusiasmo y, desde entonces, empieza a prestar variados servicios. Nollet y Charles la introducen en la Sorbona para hacer demostraciones visuales de sus enseñanzas, y Mesmer la utiliza en sus sesiones de hipnotismo y en sus cátedras sobre la teoría del magnetismo animal.

El profesor Charcot la emplea para curar, por medio de proyecciones, ciertos casos de epilepsia e histeria. Al correr del tiempo la linterna mágica se perfecciona. Descubierta la electricidad y, por consiguiente el arco voltaico, la linterna mágica lo adopta, mejorando notablemente las proyecciones.

Con el advenimiento de la fotografía, las primitivas transparencias pintadas sobre vidrio se sustituyen por diapositivas y la linterna mágica se convierte además en ampliadora fotográfica. Le quedaban sólo unos cuantos pasos que recorrer para transformarse en el proyector cinematográfico.


Las primeras cámaras fotográficas

 

Capítulo anterior

       Siguiente capítulo