Si
una persona ronca mucho al dormir, se le da un pequeño golpe
con huarache en la nariz, o se le introduce la cola de una pequeña
lagartija en una de sus fosas nasales. Hecho alguno de estos remedios,
ya no volverá a roncar, porque se tiene que sobresaltar cuando
despierte.
(Versión en Tzotzil) |