Y
en México lo que vive detrás de las máscaras es
una enorme cantidad de miedo, odio y, por supuesto, deseo entre
el yo y el otro. En México el deseo siempre se está
contradiciendo a sí mismo y lo hace a todo nivel: de raza, clase,
género, orientación sexual, religión. |
Los
indios odian y aman a los blancos; los blancos menosprecian y secretamente
desean a los indios; los mestizos no se pueden reconciliar con estar
a la mitad entre uno y otro y por ello les atraen y los repelen tanto
los blancos como los indios; los hombres veneran y desprecian a las
mujeres; los pobres idolatran a los ricos aun cuando sueñan con
una segunda Revolución Mexicana que los derroque, y los ricos
se forman una idea romántica de los pobres al tiempo que hacen
todo lo que está a su alcance para mantenerlos en su lugar. |
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