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Como educador de fotografía comercial en el Sheridan Institute of Technology (espero nadie se oponga a esta pequeña y desvergonzada autopromoción), el panorama de lo digital contra lo analógico es distinto y más sencillo. He enseñado a hacer imágenes digitales desde 1993 y, junto con mis colegas he dicho a mis superiores académicos que en el campo de la foto comercial, el juego ha sido ganado por lo digital, y que nuestro programa debe hacer rápidamente esta transición. He alegado que aunque continuemos enseñando manipulación y edición de imagen, como hemos hecho desde 1991, debemos comprometernos a enseñar más seriamente la captura digital, ya que de otro modo no estaríamos preparando a los alumnos para el trabajo en estudios comerciales.

He presentado este argumento consciente del hecho de que un gran número de estudios en el área de Toronto trabajan utilizando únicamente medios digitales. Afortunadamente se alcanzó un compromiso hace dos años y estamos cambiando rápidamente nuestro programa de estudios y adquiriendo la tecnología necesaria. Actualmente tenemos a disposición de nuestros 160 estudiantes 60 cámaras CanonD60 y 10 DSLR, así como 16 kits de Phase One/Mamiya 645/Power Book Mac Intosh, además de nuestro nuevo laboratorio de edición con una Mac G5. Dentro de Sheridan he promovido constantemente el potencial expresivo de la foto digital sin reservas, y al mismo tiempo he escuchado con oídos comprensivos las quejas y dudas de colegas que siguen sin estar convencidos, que no quieren aprender nada nuevo y que deben ser llevados a rastras hacia la era digital. Mi papel ha sido que tener que mostrar con el ejemplo y utilizar una persuasión delicada para ayudar a mis compañeros educadores en esta transición.