Me
encontraba platicando en la banqueta con el Güero y el Flaco. Hace
dos años, ellos vivían aquí, en las calles de Tasqueña.
Recuerdo que los invité a irse a vivir al Hogar para Niños
de la Calle del Padre Chinchachomas, donde siguen viviendo. Se ven muy
bien e iban de camino a la escuela. Se siente bien el volverlos a ver.
El Güero me cuenta que ganó un premio haciendo el mejor
mueble (una mesa) en un concurso de su clase de carpintería.
De repente, el Pájaro gritó pidiendo ayuda al Negro. Vi
a un hombre corriendo por la calle perseguido por los niños.
El hombre golpeó al Negro sin ninguna razón. Nadie entendió
por qué. |
. . . . . . . .
Felipe
lleva un par de guantes de boxeo y Jorge lleva un pequeño morral
sobre su hombre derecho. Deben tener alrededor de nueve o diez años.
Los conocí saliendo de la estación de metro Tasqueña.
Me pidieron dinero y les compré un refresco. Jorge y Felipe iban
a comer, así que me invitaron. Más tarde, en la fuente,
sacaron del morral un pan Bimbo, sardinas, jitomates y chile.
|
Los
edificios dañados por el terremoto son muy peligrosos para vivir.
El Garrocha y Toni murieron cuando se cayó el edificio en el
que dormían en agosto de 1991. Guillermo sobrevivió y
ahora lo apodan El Siete Vidas. |
Patachín
Patachín,
el acapulqueño, fue atropellado por un carro y perdió
una pierna. Los otros niños lo llaman Patachín según
un personaje bélico de caricatura, que tenía sólo
una mano para disparar. No había suficiente agua en la fuente
y estaba bastante sucia, pero a los niños les encanta ir ahí.
Es un lugar donde pueden nadar en el agua fría y tomar el sol
en paz. |
. . . . . . . .
Efeo
fue mordido por una rata. El gana su dinero lavando los parabrisas de
los carros en la esquina de Miramontes y Tasqueña. El Chato,
un taxista, lo llevó al hospital para que lo vacunaran de la
rabia. El tratamiento tarda un par de semanas y mientras tanto Efeo
se está quedando con el Chato y su familia. |
1 | 2 | 3 | 4 | 5 | 6 | ||||