Esta figura de Jesucristo fue recientemente restaurada, antes del comienzo de la Semana Santa. Una noche a eso de las 10:00 PM, el padre Santiago, quien es el único sacerdote de Amatitlán, me pidió que lo llevara a la ciudad (una hora de distancia en automóvil) parar traer de regreso la imagen. Era demasiado grande, así que tuvimos que abrir la ventanas del carro para que cupiera. Era ya muy tarde cuando regresamos al pueblo. Pusimos la pesada imagen en la sacristía, esta foto fue tomada esa fría noche.

Quiero mencionar que el Padre Santiago Rojas fue quien obtuvo los $ 17,000.00 pesos del Vaticano.

Gracias a eso, y al esfuerzo de las mujeres, es que ahora tienen una perspectiva diferente en sus vidas. Él es la persona que las impulsó a continuar con esfuerzo y unidad sus proyectos.